jueves, 5 de mayo de 2011

AUTISMO



Una de las primeras preguntas que nos hicieron nuestras compañeras Inma Olivera, Marta y María fue: ¿Qué sabéis sobre el Autismo? Interiormente, mi respuesta fue: sinceramente NADA.

Es cierto que las preguntas que nos plantearon nuestras compañeras, son mitos acerca de este colectivo, pero al igual que la mayoría de las personas pensaba que el autismo es una enfermedad, o que aquellas personas que lo padecían eran personas con altas capacidades intelectuales, pero a través de la exposición de mis compañeras he podido comprobar que no.

El término autismo proviene del griego “autós” y significa “uno mismo”. La primera que se utilizó fue por Bleuber (1911) en un tomo del American Journal of Insanity, aunque no exactamente se refería al término que actualmente conocemos, pero si fue uno de los pioneros junto con Kanner en investigar sobre este trastorno. Kanner en 1943, define el autismo como un síndrome conductual que se manifiesta por una alteración del lenguaje, de las relaciones sociales y los procesos cognitivos en las primeras etapas de la vida.
Es a partir de los años 60, cuando se empieza a investigar más profundamente sobre este trastorno, de manera que cuando más avanzan en la investigación más conocimientos se tiene sobre las causas y efectos de este síndrome. Fue a partir de esta época, cuando diversos autores discrepan con los autores ya mencionados. Rutter, expresa que el autismo proviene de un origen orgánico cerebral y también un síndrome conductual caracterizado por diversos síntomas que son comunes a todos los niños autistas y específico de este trastorno.
Actualmente, se define como un trastorno del neurodesarrollado causado por una disfunción del Sistema Nervioso Central, que se diagnostica como un síndrome conductual y que impide un desarrollo normal de funciones psicológicas superiores. De una manera más sencilla podemos definir el autismo como un síndrome que afecta a la comunicación y las relaciones afectivas y sociales del individuo.

Nuestras compañeras, nos aportaron mucha información sobre este colectivo, nos explicaron que dentro del autismo existían diferentes tipos como:
- Síndrome de Kanner: los síntomas de este síndrome es que el niño ni habla, ni se reaciona.
- Síndrome de Asperger: se caracterizan por tener un nivel lingüístico e intelectual muy alto.
- Teoría de Rett: se refiere a aquellas personas con deficiencias intelectuales.
- Teoría desintegrativo de la niñez. El niño pierde las habilidades desarrolladas.
- Teoría profundo del desarrollo no Especificado. Se engloba a aquellos casos que no encajan en ninguno de los anteriores.

No existen unas causas definidas que expliquen la aparición de dicho trastorno, aunque existen teorías que exponen que se transfiere a través de una combinación de genes. Actualmente, hay diversos estudios que afirman que existen causas biológicas como el síndrome del cromosoma X frágil, la fenilcetonuria y la esclerosis múltiple. Aún con todos los estudios que se han realizado sobre este trastorno, no se sabe con exactitud cual es la zona afectada, aunque se intuye que puede ser el cerebelo y el sistema límbico. Por tanto, se puede deducir que este trastorno se desarrolla durante toda la vida y no tiene curación, pero si se puede ayudar a la persona que lo sufre a través de tratamientos ya no solo farmacológicos sino socioeducativos.

Entre las diferentes características que presenta un niño que padece autismo destacamos:
- Coeficiente intelectual generalmente por debajo del normal. A diferencia que el síndrome de Asperger que se caracteriza por un alto rendimiento y altas capacidades.
- Normalmente el diagnóstico se realiza antes de los 3 años. Posteriormente expondré un cuestionario para los padres, donde se puede detectar si el niño padece este trastorno.
- El trastorno autista no gestiona la realidad igual que el resto de niños.
- Desinterés general en las relaciones sociales. Se relacionan con los demás de manera peculiar, pueden parecen contentos pero su sonrisa no es social.
- No manifiestan que tengan frió o calor. Se muestran inmunes al dolor.
- Solamente responden a los estímulos físicos.
- Ningún interés obsesivo de alto nivel.


Como principal rasgo común de las personas que padecen autismo es la “Tríada de las deficiencias”:
- Deficiencia en la interacción social. Existen diferentes grupos: grupo aislado, grupo pasivo, grupo activo y grupo hiperformal.
- Deficiencias de la comunicación. Problemas en la utilización y comprensión del habla, entonación y control de voz, utilización y comprensión del lenguaje no verbal. Retraso en la aparición del lenguaje. Gramática y vocabulario limitados.
- Deficiencias en la imaginación. No llevan a cabo ningún tipo de juego imaginativo. Realización de acciones repetitivas. Sensaciones físicas.

He visto conveniente para esta entrada hablar un poco de los padres. En este caso, al igual que siempre los padres tienen un papel primordial para detectar si su niño padece algún trastorno o alguna enfermedad, o simplemente si tiene un resfriado. Muchos estudios realizados han coincidido en que el mejor tratamiento para un niño autista es el afecto, y quien mejor que su familia para dárselo. Entendemos que un niño autista necesita del cariño y la comprensión del resto de personas, por ello no debemos apartarlos de la sociedad ni clasificarlos como seres sin afecto y sin relaciones sociales, pues sabemos que si se interviene con ellos desde edades tempranas pueden desarrollar la afectividad y relacionarse con los demás. Es por tanto, que debemos sensibilizar a la sociedad que los autistas son ciudadanos con derechos al igual que cualquier otra persona.

El autismo no se detecta como ya he mencionado anteriormente hasta los 3 años, pero Baron Coreh pretende lanzar un cuestionario a los padres con el que se persigue detectar el trastorno a los 18 meses. Este cuestionario engloba las siguientes preguntas:
- ¿Disfruta su hijo al ser mecido, botar en sus rodillas…?
- ¿Se interesa su hijo por otros niños?
- ¿Le gusta a su hijo subirse a los sitios, como a lo alto de las escaleras?
- ¿Disfruta su hijo jugando al escondite?
- ¿Simula alguna vez su hijo, por ejemplo, servir una taza de té usando una tetera y una taza de juguete, o simula otras cosas?
- ¿Utiliza alguna vez su hijo el dedo índice para señalar, para pedir algo?
- ¿Sabe su hijo jugar adecuadamente con juguetes pequeños y no sólo llevárselos a la boca, manosearlos o tirarlos?
- ¿Alguna vez su hijo le ha llevado objetos para mostrarle algo?

A partir de las respuestas el pediatra estudia el caso y diagnóstica se padece o no trastornos autistas. Bajo mi punto de vista, creo que es un instrumento efectivo ya que cuanto antes sepamos el diagnóstico antes podremos intervenir con el niño, por lo que posteriormente los resultados que presenten el niño serán más favorables (también depende de la situación del niño).

Nuestras compañeras en su aplicación práctica se apoyaron en la Asociación Autismo de Sevilla, una asociación provincial sin ánimos de lucro, que tiene por objeto promover la calidad de vida de las personas con trastornos del espectro autista (TEA) y de su familia a lo largo de su ciclo vital.
El trastorno fundamental en estas personas es el del lenguaje por lo tanto el tratamiento debe ser socioeducativo. Esta asociación se apoya en un programa llamado TEACCH, basado en un sistema estructurado que sirva como base para una intervención cognitivo-intelectual.
Con estos niños es imprescindible seguir la rutina todos los días. Un instrumento idóneo en este sentido es el pictograma, un signo que representa esquemáticamente un símbolo, objeto real o figura. Con esta metodología ayudamos a los niños autistas a seguir una rutina a través de un símbolo, es decir secuencian lo que tienen que realizar día tras día.
Esta Asociación presta muchos servicios para los niños con trastornos autistas, entre ellos la atención a la familia, que tiene como función la de informar, asesorar y formar a aquellas familias de las personas con TEA.
La metodología a trabajar con estos niños, bajo mi punto de vista es una intervención individualizada, pues cada uno presentará diferentes características. El educador social, tiene un papel importante en la intervención con este colectivo, ya que se debe intervenir a través de un proyecto socioeducativo personalizado elaborado anteriormente. Sabemos que su aprendizaje es muy lento por tanto la metodología será apropiada a sus necesidades y, por ello hay que buscar estrategias ajustadazas a su nivel de aprendizaje e ir mejorando su formación académica.

Como conclusiones tenemos que destacar la importancia de los padres, el afecto y el cariño que se les debe transmitir a estos niños, es la mejor medicina para su evolución, por ello los padres deben buscar y mantener contactos con asociaciones para padres de niños autistas para formarlos dentro de éstas. La educación especial es otro aspecto importante, siendo ésta en la escuela específica a través de una intervención individualizada, además de una programación exhaustiva para que ellos no pierdan la noción del tiempo, siendo una intervención muy planificada.

Para finalizar, decir que la exposición me resultó interesante y además aprendí muchos conceptos e ideas de los que no tenía ni idea. Ahora si me preguntan ¿Qué sabes del síndrome autista? Mi respuesta no será la que anteriormente expresé, pues ya puedo decir qué es, qué características presentan estos niños, qué intervención es la apropiada… entre otras cosas.
Aprovecho este momento para afirmar que sinceramente sé que a través de estas exposiciones aprendo más que si se tratase de un tema denso, pues todos los días aprendo cositas nuevas a través de las experiencias que nos transmiten nuestros compañeros.

1 comentario:

  1. Esther,vas muy bien este segundo cuatrimestre. Buen nivel de reflexión en tus entradas, pero no te duermas en la recta final eh?

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